Ahora que en mi diáspora he de marchar ligero de equipaje, cuenta seguro con que habrá un hueco en la maleta para este libro.
Siento que no pudiera ser partícipe en el proyecto pero ahora me doy cuenta que era realmente imposible. Ojalá algún día…
De todas formas el próximo lo mismo has de escribirlo desde las costas de ese océano Pacífico que tan irónicamente bautizó -creo- Pizarro.
Mira, te regalo esa idea.
ENHORABUENA POR TUS ÉXITOS